Nos hemos despertado este sábado, con precipitación de agua nula, pero con imágenes del paisaje blanco …
Desde antes del cruce del valle de Estós, la nieve en las montañas ha estado presente, la nortada ha hecho que al parabrisas del coche le hayan impactado algunos copos. Pasamos del verano al invierno en unas horas, pero seguimos sin precipitaciones de agua, y se necesita, aunque visualmente el paisaje nos alegra.